El nuevo Secretario Adjunto de la SEGIB, el brasileño Ruy Amaral, ejerció como anfitrión el martes, 11 de enero, en la presentación en el Conversatorio de la SEGIB del audiovisual de Miguel Zavala “Haití, Año Cero”, dentro del programa de actividades que la SEGIB está apoyando con ocasión del aniversario del terremoto que asoló el país hace un año.
El acto estuvo presidido por la embajadora de Haití en España, Yolette Azor-Charles, con la presencia de Ernesto Rousseau, fundador del Círculo Cultural de Amistad Hispano-Haitiana y del fotógrafo y productor del audiovisual, Miguel Zavala.
En su intervención, Ruy Amaral señaló que el terremoto ha sido una tragedia sin precedentes en la historia reciente de nuestra región, y recordó las palabras del Secretario General Enrique V. Iglesias, quien visitó Haití, el 6 y 7 de febrero del 2010, pocos días después del terremoto y dijo: “Esta tragedia puede ser también una esperanza para el país, la esperanza de haber sacudido la solidaridad internacional y la esperanza de reconstruirlo sobre nuevas bases”.
Amaral hizo referencia a un caso concreto que reproducimos por su interés:
“Una de las figuras humanas que más admiré a lo largo de mi vida fue la pediatra brasileña y especialista en salud publica, Zilda Arns. Mujer emblemática y de referencia nacional e internacional que creó y dirigió entre 1982 y 2010 la Pastoral de la Infancia, organización que actúa en 42 mil comunidades pobres brasileñas a través del trabajo de 260 mil voluntarios capacitados por esa entidad. Zilda Arns revolucionó la salud pública en estas comunidades. La desnutrición de los niños fue controlada. De 50% en el inicio de su programa, el índice bajó a 3.1% en nuestros días. La mortalidad infantil cayó de 82,8 por cada mil nacidos a 13 por mil. Actualmente, más de 2 millones de niños y 80 mil mujeres son atendidas en todos los niveles del embarazo hasta la gestación por la Pastoral de la Infancia en acciones de salud, nutrición, educación y ciudadanía.
Zilda Arns fue una de las víctimas fatales de ese trágico 12 de enero de 2010 en Puerto Príncipe. Ella estaba ahí compartiendo la metodología de la Pastoral de la Infancia para el combate a la desnutrición infantil. Momentos antes del temblor, durante un discurso, pronunció las siguientes palabras: “La construcción de la paz empieza en el corazón de las personas y tiene su fundamento en el amor, que tiene sus raíces en la gestación y en la primera infancia, y se transforma en fraternidad y corresponsabilidad social. La paz es una conquista colectiva. Tiene lugar cuando impulsamos a las personas, cuando promovemos los valores culturales y éticos, las actitudes y prácticas de búsqueda del bien común.”
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