El ministro español de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, presidió el 27 de septiembre en Nueva York el encuentro de ministros de Asuntos Exteriores iberoamericanos, en el que también participó el secretario general iberoamericano, Enrique V. Iglesias. El encuentro se celebró aprovechando la coincidencia de todos ellos en Nueva York para participar en la 67 Asamblea General de la ONU.
Uno de los principales objetivos de la reunión era repasar el estado de preparación de la XXII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, que se celebrará los días 16 y 17 de noviembre en el Palacio de Congresos de Cádiz, bajo el lema ‘Una Relación renovada en el Bicentenario de la Constitución de Cádiz’. También se analizaron los avances registrados en las ocho reuniones ministeriales ya celebradas durante este año y se ha examinado la documentación que emanará de la Cumbre, con especial atención a las políticas de crecimiento económico.
El encuentro brindó a los Cancilleres la ocasión de compartir puntos de vista sobre diferentes temas relacionados con la actualidad regional e internacional. Respaldaron también la creación de un centro de arbitraje internacional para la resolución de conflictos, cuyo acuerdo se firmará próximamente en Brasil. A este acuerdo se han adherido ya casi cuarenta instituciones latinoamericanas.
Todos los asistentes insistieron en la necesidad de crear un grupo de reflexión para analizar el formato de las cumbres iberoamericanas en el futuro. A la espera del desarrollo de las conversaciones, surgieron propuestas de algunos países para que en vez de ser anuales se celebren cada dos años.
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