La XXIV Cumbre Iberoamericana comenzó el lunes, 8 de diciembre, en la ciudad mexicana de Veracruz, con una firme llamada a la unidad de los países que componen esta comunidad de naciones.
«Este mundo no está hecho para andar solo, está hecho para ir acompañado», dijo la Secretaria General Iberoamericana, Rebeca Grynspan, para animar a los países de la región a aunar esfuerzos en este momento de cambio y renovación del foro, que empezó su andadura en 1991 en Guadalajara (México).
En este sentido, afirmó que «estamos aquí para complementar no para competir» e hizo hincapié en que «no queremos sustituir la integración latinoamericana, sino complementarla», e invitó a una relación «simétrica» y «horizontal». Grynspan subrayó que esta cita debe ser la de la renovación y citó un viejo proverbio africano, según el cual «si uno quiere ir deprisa, va solo, pero si quiere ir más lejos, va acompañado».
La construcción de identidades incluyentes es otra de las labores de la comunidad iberoamericana a través de un espacio cultural, de conocimiento y de cohesión social.
Aludió a la historia común de cinco siglos y a unas raíces que han generado un «tronco de identidades, con un ramaje de diversidad cultural que es parte de nuestro asidero vital».
También se dirigió al Rey Felipe VI para darle la bienvenida y recordar su amplia vinculación con Iberoamérica, donde ha asistido a la toma de posesión de 69 mandatarios desde 1996.
Fue precisamente el monarca el primero en subrayar, ante el plenario de la Cumbre, la necesidad de que Iberoamérica actúe con «inteligencia» y «pragmatismo», porque si esta Comunidad de Naciones está «unida» tendrá «mucho que ofrecer al mundo».
«Con visión e inteligencia, y con realismo y pragmatismo, debemos sacar el mejor partido a nuestras afinidades» y «trabajar juntos» en todos los ámbitos, político, económico, cultural, social, educativo y científico «hasta donde sea posible», sostuvo Felipe VI.
En la ceremonia inaugural, el Presidente mexicano Peña Nieto, anfitrión del encuentro, destacó la importancia de los tres ejes del cónclave que culminará el proceso de renovación del foro empezado hace dos años en Cádiz (España): educación, cultura e innovación.
«La educación es el motor del cambio», que abre la puerta de los demás derechos fundamentales de las personas, afirmó el presidente mexicano tras destacar que solo mejorando la calidad educativa, se pueden generar oportunidades de desarrollo.
«Necesitamos más y mejor educación para superar los desafíos que nuestras sociedades enfrentan», y aludió a que este foro es el marco ideal para trazar «objetivos concretos».
Por ejemplo, intercambio de mejores prácticas, aumentar la capacitación de los maestros, fortalecer la cooperación en educación básica, alfabetización de adultos y apertura de oportunidades de inclusión y desarrollo de los jóvenes.
En materia de movilidad educativa, dijo que la meta es otorgar becas a 200.000 jóvenes hasta 2020 para que puedan estudiar en cualquier país iberoamericano y puedan «mejorar sustancialmente su nivel académico».
Peña Nieto destacó la importancia de seguir difundiendo el «inmenso» patrimonio cultural iberoamericano y de impulsar la innovación. «El acceso de todos a las tecnologías de la información y la comunicación» fortalecen la igualdad y la prosperidad, aseveró.
La primera jornada de la vigésimo cuarta Cumbre Iberoamericana concluyó con una cena de los mandatarios de América Latina, España y Portugal, tras la primera sesión plenaria centrada en la educación.
Los mandatarios comenzarán la jornada del martes 9 con el «retiro», la reunión que celebran en privado, que antecederá a la segunda sesión plenaria, en la que el tema central será la innovación.
La cumbre concluirá con la aprobación de los documentos que recogerán las decisiones adoptadas, entre ellas la transformación de estas reuniones en bienales y el objetivo de centrarlas en asuntos más concretos ligados a los ciudadanos.
La agenda de la jornada del martes, dedicada a la innovación, la abre la presentación del informe «Perspectivas Económicas de América Latina 2015», a cargo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), la Comisión Económica para América Latina (Cepal) y el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF).
Los presidentes y jefes de delegación asistentes a la Cumbre comenzarán a las diez de la mañana, hora de México (las 16.00 GMT), el tradicional «retiro» a puerta cerrada para después desarrollar el segundo bloque de intervenciones del foro, en sesión plenaria, en el que expondrán sus criterios sobre la innovación.
Colombia será el país anfitrión de la XXV Cumbre Iberoamericana en 2016, según recordó su presidente Juan Manuel Santos, quien confía en que esa reunión sea ya en un país en paz, en referencia al proceso que intenta poner fin al conflicto más longevo del continente.
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