La inauguración de la XXI Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, cuyo lema es “Transformación del Estado y Desarrollo”, se celebró el viernes, 28 de octubre, en el Teatro José Asunción Flores del Banco Central de Paraguay, con la presencia de gobernantes de los 22 países que forman la Comunidad. El acto estuvo encabezado por el Presidente de Paraguay, Fernando Lugo, y el Secretario General Iberoamericano, Enrique V. Iglesias.
Durante la ceremonia, Enrique V. Iglesias dirigió a Sus Majestades los Reyes, al Presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, y a todos los españoles su felicitación por el anuncio del abandono de la lucha armada de la banda ETA.
En su discurso, Iglesias destacó que la Cumbre tiene lugar en uno de los momentos “más confusos y turbulentos de la economía mundial de los últimos 70 años”, pero que América Latina ha dado señales de “dinamismo y sentido común”, permitiéndose así capear lo peor. ”Esta es la gran oportunidad de América Latina”, dijo Iglesias al recordar que la región ha resistido los efectos de la crisis en Estados Unidos y Europa, pero alertó que “es el momento de la acción y no de la complacencia” en lo económico.
Asimismo, el Secretario General Iberoamericano animó a enfrentar el desafío de reconstruir los grandes balances de la economía mundial para restaurar la confianza dañada, demostrando de esta manera nuestra importante capacidad de transformación.
Por su parte, Fernando Lugo abogó por desarrollar un “Estado en alianza estratégica con la sociedad y el mercado” y advirtió de que la crisis, si no se hallan “soluciones adecuadas”, afectará a los países en desarrollo y comprometerá “sus expectativas de crecimiento” y sus planes de integración social.
Después de los discursos de apertura, hubo un concierto de música folklórica a cargo de una veintena de intérpretes de arpa, el instrumento nacional del país, y posteriormente el presidente paraguayo ofreció una cena de gala al resto de gobernantes y jefes de las delegaciones participantes.
Al día siguiente, sábado 29 de octubre, los dirigentes iberoamericanos tienen previsto estudiar los documentos presentados por los Cancilleres: la Declaración de Asunción, el Programa de Acción y los Comunicados Especiales.
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